Ayer día 12 de febrero, casi al final del día, fallecía en Pont d’Inca el Hno Pascual Gregorio Navarro, que había estado en la comunidad de Palma hasta mediados de diciembre, cuando por prescripción médica fue llevado a la SAFA de Pont d’Inca, casa que tan bellos recuerdos trae a la memoria de todos los que recibieron la formación o fueron responsables de la educación de tantas vocaciones de Hermano de La Salle.
Hombre entregado a la labor pastoral y de formación, siempre alegre y con la sonrisa en los labios. En los últimos años de su presencia en Palma, a primera hora de la mañana, cada día visitaba a nuestros alumnos de infantil, a los padres y madres y a las profesoras. Su labor no pasó desapercibida. Muy querido por los alumnos, que le veían como un abuelito. Muy querido por los padres y madres, que habían sido alumnos suyos en su querido 8º de EGB, y por supuesto el grupo fantástico de profesoras de infantil y primero y segundo de primaria, que era el pabellón que visitaba.
Tal era su amor y cariño a este servicio que realizaba que, estando enfermito, seguía preocupado por no poder atender a sus niños y niñas.
Podríamos seguir hablando del Hermano Pascual. Se están recibiendo muchos testimonios en las redes sociales sobre su persona y el recuerdo que ha dejado en tantos y tantos alumnos y Hermanos de La Salle. Solo podemos agradecerlos y confiados por nuestra fe en Jesús Resucitado, que el Hermano Pascual, sonríe desde el cielo y nos manda un cariñoso saludo, hoy y siempre, hasta que nos reunamos con él.
¡Viva Jesús en nuestros corazones!